El Teatro Romano constituye el principal vestigio de la presencia romana en Málaga. De medianas dimensiones, fue construido en el siglo I d. C., a comienzos del Imperio Romano en tiempos del emperador Augusto y estuvo en uso hasta el siglo III d. C. cuando aparece constatado su abandono definitivo. La restauración y puesta en valor del teatro ha dejado la orchestra decorada con losas de mármol y la scaena en la que se ha reproducido un entarimado de madera tal y como lo tendría en su época. El graderío tiene 31 metros de radio y 16 de altura y también se aprecia el vomitorium o acceso a las 13 gradas de asientos o cavea.
La obra es considerada de uso mixto al utilizar, al estilo de los teatros griegos, parte de la ladera del cerro para asentar un sector de las gradas de asientos, mientras que el resto se apoya sobre cimentaciones artificiales.
Tras su abandono en el siglo III, el espacio se ocupó por estructuras relacionadas con la industria de la salazón. Actualmente, se pueden observar una serie de piletas donde se elaboraba el famoso garum bajo la pirámide de cristal de calle Alcazabilla. En el siglo V se dio un nuevo uso al teatro, convirtiéndolo en necrópolis.
El visitante puede ampliar más información en el centro de interpretación, un edificio adyacente al teatro, cuya fachada lateral está decorada con un texto de la Lex Flavia Malacitana. Además, de poder disfrutar de piezas originales encontradas en las recientes excavaciones se puede conocer la vida y las costumbres de la época a través de las nuevas tecnologías.
Información práctica:
Localización: Calle Alcazabilla s/n, a los pies de La Alcazaba.
Teléfono: 951 501 115 / 671 539 212
Entrada gratuita
El horario de visitas es de martes a sábado de 10 a 18 horas. Domingos y festivos de 10 a 16 horas. Cierra los días 1 y 6 de enero, 1 de mayo, 24, 25 y 31 de diciembre.
Para visitas guiadas se recomienda reserva en el teléfono 951 501 115
