Andalucía brilla. La magia y el encanto de las ocho provincias reside en su diversidad. Un conjunto de historia y patrimonio, cultura, gastronomía, parques nacionales y naturales, playas, tradición y costumbres. Sus gentes, su clima, ciudades, pueblos, y por encima de todo, una belleza que no deja indiferente.
Aquí te dejamos un resumen de las siete provincias, que junto a Málaga, conforman esta increíble Comunidad Autónoma.
ALMERÍA. A 200 km de Málaga.
La Alcazaba, una de las fortalezas árabes más grandes de Europa y construida por Abderraman III en el siglo X, es uno de los principales atractivos de Almería capital. Desde allí se puede contemplar una impresionante vista de la bahía y la ciudad. La Catedral de la Encarnación tiene la peculiaridad de que tiene estructura de fortaleza. El paraje del Cabo de Gata, el Desierto de Tabernas o la Geoda de Pulpí son otras propuestas en el entorno cercano de la ciudad.
CÁDIZ. A 235 km de Málaga.
Cádiz es el paraíso de la tranquilidad y la ‘slow life’. El casco antiguo de la capital invita a pasear por el barrio de pescadores de La Viña o El Pópulo. Su Catedral, de estilo barroco y neoclñásico, enamora como toda la ciudad. Merece la pena subir a la Torre del Reloj para contemplar la azoteas de este enclave trimilenario. Pero lo mejor de Cádiz es pasear junto al mar al atardecer por la playa de la Caleta entre las siluetas del Castillo de Santa Catalina o el Castillo de San Sebastián.
CÓRDOBA. A 159 km de Málaga.
Contemplar la Mezquita Catedral ya merece una escapada, pero Córdoba, la ciudad del mundo con más títulos Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, ofrece otros atractivos que la hacen una ciudad singular. Perderse por las callejuelas de la Judería y su calle de las Flores o la Sinagoga, visitar los patios del Palacio de Viana; descurbrir los monumentos y rincones de su casco antigua que nos trasladan a la época andalusí, y adentrarse en en la ciudad palatina Medina Azahara (a 20 minutos en coche).
GRANADA. A 127 km de Málaga.
Es un privilegio sumergirse en la atmósfera de la Alhambra, un conjunto integrado por la Alcazaba, los Palacios y los Jardines del Generalife. Imprescindible cruzar al Albaicín y disfrutar de las vistas de la Alhambra, especialmente desde el mirador de San Nicolás. Otra de las sorpresas es el barrio del Realejo, la antigiua Judería, donde poder tapear. El singular barrio de Sacromonte, donde se instalaron familias gitanas en la Reconquista y construyeron las peculiares casas-cueva es otra de las visitas ineludibles.
HUELVA. A 304 km de Málaga.
La provincia de Huelva aguarda con sorpresas para el visitante. El pueblo de Palos de la Frontera fue la cuna del Descubrimiento y en el Museo Muelle de las Carabelas se pueden visitar reproducciones de La Pinta, La Niña y La Santa María. El Monasterio de la Rábida, donde se hospedó Cristóbal Colón antes de emprender la travesía, conservan numerosos objetos conmemorativos del Descubrimiento. Una escapada a Punta Umbría o el Rompido completas esta singular escapada.
JAÉN. A 204 km de Málaga.
Hablar de Jaén es también hacerlo de Baeza (a 242 km) y Úbeda (a 249 km), exponentes estas últimas de la arquitectura renacentista y declaradas Patrimonio de la Humanidad. En Jaén, el encanto del Castillo de Santa Catalina y su Catedral de la Asunción; en Úbeda, la Sacra Capilla Funeraria de El Salvador o la Basílica de Santa María de los Reales Alcázares, y en Baeza, todo su centro histórico. El cielo de Sierra Morena y la Sierra Sur está declarada por la UNESCO como Reserva Starlight por se uno de los mejores lugares para ver estrellas.
SEVILLA. A 206 km de Málaga.
Sevilla es una de esas ciudades que hay que visitar al menos una vez en la vida. La Catedral de Sevilla, considerado el templo gótico más grande del mundo; la Giralda, la torre campanario de casi un centenar de metros y vestigio de la antigua mezquita sobre la que se construyó la catedral; la Torre del Oro, a orillas del Guadalquivir; la plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla; la Plaza de España, escenario de escenas de Star Wars, y los barrios de Santa Cruz y Triana completan una visita que será, sin duda, inolvidable.
